TENSADO DE PIEL (CON ESTIMULACIÓN DE COLÁGENO)
(MEDICINA ESTÉTICA – LÁSER)
El láser es un sistema basado en ondas de radiofrecuencia que producen un calentamiento (entre 38 y 60 ºC) del tejido conjuntivo profundo sin que se vea afectada la primera capa de la piel. Es dirigido a todas aquellas personas que solicitan tratamientos estéticos no agresivos e inocuos.
Con el paso de los años, la piel se muestra envejecida. Algunos fibras de colágeno se dañan, provocando la alteración de la estructura de la molécula del colágeno, y por consiguiente su organización en forma de fibras. Estas fibras alteradas en lugar de agruparse forman ovillos con estructura amorfa, dando lugar a la flacidez cutánea y las arrugas.
El transcurso del tiempo también afecta a las células fabricantes de colágeno, los fibroblastos, que con los años se vuelven más perezosos. La forma de activar estas células, es la aplicación de calor intradérmico que estimula la neocolagenosis, (es la regeneración del colágeno por estimulación de los fibroblastos). De esta manera, se aumenta la producción de nuevo colágeno y se repara el existente, con la consiguiente mejora de la flacidez y las arrugas.
Durante el tratamiento se percibe una mejoría paulatina de la piel y se aumenta la tensión de la misma, produciéndose un auténtico efecto lifting que presenta sus mejores resultados en el cuello, las mejillas, los pómulos, el contorno de los labios y los ojos. A medida que se avanza en el número de sesiones se observa unos mejores resultados, cuyos efectos pueden llegar a permanecer entre un año o año y medio tras la finalización del tratamiento. Durante este periodo permanecerán activados los fibroblastos para la producción de colágeno.