Drenaje Linfático

por ideal

DRENAJE LINFÁTICO

(TECNOLOGÍA)

El sistema circulatorio linfático recorre casi todo el organismo. Los vasos linfáticos transcurren próximos a las venas, pero no son visibles a simple vista como estas. Su misión principal es contribuir a reabsorber el exceso de líquido (edema) que se forma en los tejidos. El líquido que se encuentra dentro del sistema linfático se denomina linfa.

El drenaje linfático manual (DLM) es una técnica, que mediante suaves y repetitivas maniobras, siempre superficiales y agradables sobre la piel, logra acelerar e incluso redirigir la circulación linfática superficial. Su aplicación acelera la reabsorción del edema. Es un método que tiene como finalidad drenar líquidos subcutáneos hacia los ganglios.

Como su propio nombre indica se realiza con las manos del terapeuta, no con aparatos o máquinas. Aunque algunos de estos aparatos pueden acelerar también la circulación de la linfa, su utilización debe ser un complemento no un sustituto al DLM.

No es una técnica agresiva, los amasamientos o las manipulaciones fuertes de masaje no forman parte del drenaje linfático manual.

Tiene como beneficios:

  • Favorece la circulación del retorno venoso.
  • Colabora en la eliminación de placas celulíticas.
  • Ayuda a resolver edemas (hinchazón) y es muy efectivo en el tratamiento post quirúrgico.